miércoles, 19 de diciembre de 2012

"El Correo"(12/07/1978). Vitoria: más de tres mil personas volvieron a manifestarse en la mañana de ayer





En la página 13 se relatan las dos manifestaciones que tuvieron lugar el día 11 de julio en Vitoria. Por la mañana se celebró la manifestación pacífica, a la que asistieron representantes de todos los partidos políticos y sindicatos, excepto UCD y Alianza Popular. Así pues esta amplia noticia  sobre las multitudinarias manifestaciones en Vitoria está redactada a cuatro columnas  y posee varios ladillos que rompen la tónica general del periódico, ya que éstos  están en negrita y un poco separados del texto, al contrario que en el resto de los ladillos.

El titular de esta noticia está compuesto por letras de palo seco y excepto “Vitoria” el resto de palabras que lo componen se encuentran en minúscula. Este titular engloba a toda la información que aparece en la página, es decir, la manifestación que tuvo lugar por la mañana, los paros de las empresas, los daños materiales  y los comunicados que los diferentes partidos políticos anuncian durante la manifestación.

Sin embargo la manifestación que tuvo lugar por la tarde, al ser la que más repercusión tuvo, posee su propio título “Asalto al Palacio de Justicia” y su antetítulo “tras la manifestación…”. Es decir, visualmente el periódico el periódico divide las dos manifestaciones pero no las divide temáticamente. La manifestación de la tarde es la que más repercusión tuvo  debido a que fue la más problemática. A ella asistieron más de 3.000 personas que arrojaron cócteles Molotov contra la delegación de Hacienda en Vitoria y asaltaron el Palacio de Justicia.

“El Correo” no se caracteriza en ésta época por  publicar muchas imágenes en sus páginas. Sin embargo en esta página publica dos fotografías, una de ellas retrata un momento de la manifestación y en la que se puede ver la pancarta y en la otra se aprecian los destrozos de una entidad bancaria a causa de los disturbios que tuvieron lugar por la tarde en Vitoria. Esto es comprensible, ya que cada vez que hay una manifestación con revuelta, este periódico dedica siempre un espacio para contar los desperfectos y los costes económicos d la revuelta.

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