En
la página 13 aparece una crónica sobre el funeral de Germán Rodríguez. Está
dentro de la sección regional y en el especial “Sucesos de Pamplona”. Se trata
de una crónica muy detallada a cinco
columnas, con una imagen a dos columnas de la llegada del féretro, un
antetítulo en mayúsculas y subrayado (no en cursiva) y un titular informativo
con letras de palo seco y mayúsculas. La crónica ocupa casi toda la página del
periódico y forma una estructura de “L” invertida. Es en esta crónica donde se
habla por primera vez de quién era Germán Rodríguez, los años que tenía, que
era miembro de LKI-ETA IV Asamblea aunque no se habla de cómo cayó herido de
bala por las armas de las FOP.
Otro
aspecto a destacar de esta crónica son las palabras que el cura pronuncia
durante la homilía. Se tratan de palabras de repulsa contra lo sucedido y con
cierto toque de nacionalismo independentista
con frases como “tenemos la extraña sensación como si alguien desde la
oscuridad nos estuviera acechando y nos apuntara a la frente con un fusil, como
si alguien, empleando los trucos sucios de una irrisoria democracia, quisiera
cortarnos el aliento y la andadura”.
Al
tratarse de una crónica muy extensa cuenta con
hasta seis ladillos para poder estructurar fácilmente la crónica
siguiendo las intervenciones de los asistentes al funeral o de lo que sucede
cronológicamente. La crónica señala todo
lo que sucede durante el entierro pero es apreciable la importancia que le da
al hecho de que en un principio, junto a las fotos de Germán vivo en el altar a
modo de conmemoración, sus compañeros del LKI pusieron la foto del joven, ya
cadáver, con la cara desfigurada y con la herida de bala en la cabeza, imagen
que los familiares pidieron que se
quitara. Esto es remarcable porque el periódico lo explica dos veces en el
mismo espacio. Por otra parte en la crónica también queda patente la simpatía
que el pueblo siente por ETA (ya que repite varias veces que cada vez que se
oían gritos a favor de ETA la gente aplaudía) y el hecho de que el fallecido
pertenecía a ETA IV Asamblea. Con esto queda claro que el periódico sólo
informa y no se preocupa de que la víctima sea conocida, ya que a pesar de que
la muerte de Germán originó muchas revueltas, solo le dan a conocer lo
estrictamente necesario a lo largo de esta edición y de las siguientes.
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