Calma aparente y miedo en las calles de Pamplona (ABC)

Después de lo ocurrido se podía observar el miedo en las calles. Los restaurantes estaban cerrados y los lugares afectados eran numerosos. Los mozos se desentendieron de las fiestas y solicitaron la dimisión del Gobernador civil, además de la retirada de las fuerzas del Orden Público. La muerte de un joven en San Sebastián aumentó el miedo.
Los ocho heridos de bala que permanecieron hospitalizados evolucionaron favorablemente. Dos de ellos no quisieron dar su nombre ni información. Además, las seis personas que quedaban detenidas fueron puestas en libertad. Esto fue una condición de las peñas para que se reanudaran las fiestas.

Se trata de una crónica por teléfono, ubicada en la sección “Nacional”,  en la página 7 del periódico ABC el miércoles 12 de julio de 1978. Como todas las crónicas, esta va firmada. Utiliza un título valorativo, además de un antetítulo, una entradilla, dos sumarios y dos ladillos. Es un artículo a dos columnas, al igual que el titular, y ocupa dos tercios de la página. Narra la situación desoladora que vive Pamplona desde el punto de vista del cronista.  El periodista cuenta una anécdota sobre los gestos simpáticos que se producen entre compañeros en momentos difíciles.